Cuerpo humano

Normalmente, lo más fácil es pensar que todos los cuerpos son compactos y su materia es uniforme. La piedra lo es, una bolsa llena de arena, el agua que llena el cubo, una cera para pintar, la madera del mueble…

Pero los seres vivos estamos hechos de órganos, que llevamos dentro del cuerpo y nos rellenan de una forma extraña. Hay huecos aquí dentro, como el del estómago o el del esófago, y vísceras que funcionan solas, glándulas que sueltan sustancias, y un corazón que late, suspendido a un lado del pecho, encargado de bombear la sangre de las venas. Y luego están los huesos, claro, y los músculos, ¡madre mía todo lo que nos cabe!

Lo mires por donde lo mires, el cuerpo humano (cualquier cuerpo vivo), es una obra maestra. ¿Cuántos años creéis que nos habría llevado idear una máquina tan perfecta y tan engranada si no la conociéramos?

Los materiales que encontraréis en esta sección sirven para desentrañar estos misterios y quizás plantearse otros muchos sobre nuestro cuerpo humano. Hay en ella materiales que dan respuestas y otros que ayudan a crearlas, ¡o todo a la vez! 

Ya desde muy pequeñas/os obsevamos nuestras extremidades y nos fascinamos con su movimiento y más adelante, con el dominio de las mismas. Aprendo a nombrarme, a conocer los límites de mi yo respecto a los/las demás. Con el paso de tiempo, a través del juego simbólico, también aparece reflejada esa curiosidad por nosotros/as mismos/as. Jugamos a ser médicos, dentistas, y nos observamos unos/as  otros/as con asombro. 

Si sois profes, acompañantes o maestros/as, ya trabajéis en las aulas con metodología ABP, por proyectos o de otras formas, llega un momento en el que el cuerpo humano se convierte en objeto de estudio y es una pasada la cantidad de interés que suscita en las niñas y los niños. En clase de una de nuestras hijas, hasta montaron un hospital y determinaron horas de consulta y todo, con una sala de espera en toda regla que habilitaron en el pasillo. Había por supuesto también una farmacia de guardia siempre abierta y unas radiografías viejas les servían para poder diagnosticar roturas de tibia o de clavícula. Así, jugando, fueron aprendiendo los nombres también de los huesos, entre otros (entre otras muchas cosas).

Nosotras también somos unas fascinadas del cuerpo humano y en esta sección tenemos materiales que nos habría parecido genial tenerlos en clase o en casa cuando éramos pequeñas, para explorar. ¿Cómo se puede entender mejor el cuerpo humano y la singularidad de su esqueleto que viéndolo de la forma más real posible? 

Actividades tan cotidianas como mover la mano, ¿cómo lo hacemos? Con una de las radiografías que tenemos en la web, por ejemplo, podemos entender que doblamos los dedos gracias a la maravillosa presencia de las articulaciones, que sujetan todos los huesos como si fueran bisagras. ¿Y la rodilla? ¿Habéis visto alguna vez el diseño tan perfecto de una rodilla? Fascinante.

Para los/las más pequeños/as tenemos puzles del cuerpo humano y las maquetas del cuerpo humano les sirven para entender la disposición de los órganos en el cuerpo, su forma, su estructura, ¿sabremos decir para qué sirve cada uno? ¿Qué nos pasa cuando nos ponemos malos, cuáles son los síntomas?

El cuerpo humano es una máquina maravillosa y diseñada con mucho ingenio. Conocerla es divertido y suele llamar la atención a muchos niños y niñas. Esperamos que con estos materiales, podáis acompañarles en sus descubrimientos.